Sin desdoro alguno, el exgobernador priista Marco Antonio Mena Rodríguez apareció en sus primeras actividades públicas ya como director de la Lotería Nacional, organismo descentralizado de la administración federal morenista.
Su primera actividad en esa encomienda tuvo lugar el pasado lunes en la develación del billete del Sorteo Superior número 2777, alusivo al 45° aniversario de Nelson Vargas, “que da testimonio de su entrega y promoción por la salud a través de la natación y el deporte”.
El martes 22 de agosto, tuvo su segunda aparición al encabezar la develación del billete del Sorteo Zodiaco número 1627, conmemorativo del 20 Aniversario del Centro de Justicia Alternativa (CJA) del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México.
Sonriente, sin importarle el alud de críticas de sus correligionarios por haber aceptado ese cargo en el gobierno federal morenista, a Mena Rodríguez se le vio el miércoles 23 al lado del presidente López Obrador en la develación de un billete de lotería que conmemora el Bicentenario del Archivo General de la Nación.
Este último sorteo se llevará a cabo el domingo 27 de agosto, con premio mayor de 11 millones de pesos.
El exdiputado local priista asumió a mediados de la semana pasada como director de la Lotería Nacional, en sustitución de Margarita González Saravia, quien renunció para buscar la candidatura de Morena al gobierno de Morelos.
Aunque en redes sociales militantes priistas de Tlaxcala criticaron de manera acre la decisión de Marco Antonio Mena de convertirse en subordinado de López Obrador, e incluso lo tildaron de “traidor”, la dirigencia estatal del tricolor se limitó a decir que no haría ningún pronunciamiento institucional sobre el tema.
Para el diputado local perredista Juan Manuel Cambrón Soria, la llegada del exsecretario de Turismo en al estado a la dirección de la Lotería Nacional no fue ninguna sorpresa, pero “confirma lo que ya era un secreto a voces: la entrega del poder entre familiares en la pasada elección a la gubernatura”.