Transcurrido un mes de su designación, por fin el gobierno de Lorena Cuéllar Cisneros se dignó dar a conocer que el pastor Víctor Manuel Ávila García ya funge como nuevo titular de la Oficina para la Protección de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas.
El nombramiento del exvocero del Congreso local al frente de esa oficina –que depende administrativamente de la Secretaría de Gobierno (Segob)- se concretó a mediados de mayo, pero hasta la fecha no se ha emitido ningún comunicado específico sobre el relevo de Leonel Tlalmis en esa área creada en febrero de 2022. Aunque el arribo de Ávila García a dicha oficina trascendió un día después de su nombramiento, el gobierno estatal lo había mantenido en la más completa opacidad.
Fue apenas esta semana cuando, a través de un comunicado, la administración morenista dio cuenta de la primera aparición pública –por lo menos de la que se tiene registro- de ese funcionario. En un boletín, en el cual no se precisan fechas, se dio a conocer que Víctor Manuel Ávila supuestamente participó en un par de actividades de promoción de “una cultura de la prevención” realizadas con integrantes de los ayuntamientos de San Lucas Tecopilco y Xicohtzinco.
“El objetivo es trabajar en acciones coordinadas con los municipios para fortalecer estrategias y acciones a favor de la labor diaria que realizan las personas defensoras de derechos humanos y periodistas en el territorio estatal”, se lee en ese comunicado.
Según ese boletín, el edil de Xicohtzinco, Luis Ángel Barroso Ramírez “realizó aportaciones para fortalecer el desempeño diario de los periodistas y activistas defensores de derechos humanos”; sin embargo, en dicho texto no hay ninguna referencia a las contribuciones que, supuestamente, hizo el alcalde.
Hasta la fecha, el nuevo titular de la Oficina para la Protección de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas ha callado por las supuestas “amenazas” que hace unos días un integrante de la Sedena, adscrito a la Zona Militar de Puebla hizo, con pistola en mano, a una empleada del gobierno y a un reportero cuando se dirigían en un vehículo oficial a cubrir un acto público 4 de la gobernadora en Tlaxco.
