La diputada local priista Blanca Águila Lima cuestionó la decisión del Ejecutivo federal, avalada por el Congreso de la Unión, de desaparecer el Instituto de Salud para el Bienestar (INSABI), pues consideró que “con la salud no se puede experimentar, improvisar ni jugar.
En la sesión ordinaria de este martes, subrayó que ese instituto ni fue el parteaguas que salvaría la salud de la población mexicana, ni tampoco sirvió para lograr el propósito del presidente Andrés Manuel López Obrador de dotar a los mexicanos de un sistema de primer nivel como el de Dinamarca.
Precisó que el Insabi no dio los resultados esperados porque, en primer lugar, Dinamarca destina anualmente 11 puntos de su Producto Interno Bruto (PIB) para atender la salud de su población, mientras que México apenas otorga 2.5% y, en lugar de mejorar, se ha venido abajo y una muestra es el desabasto de medicamentos.
La también dirigente de los sindicalizados de la Secretaría de Salud en el estado, dijo el nuevo esquema -conocido como IMSS Bienestar- “no es lo mismo que el IMSS ordinario”, ya que para tener acceso a los servicios de primer, segundo y tercer nivel que ofrece el Seguro Social es necesaria la aportación de las cuotas de los trabajadores que se encuentran afiliados a través de sus respectivos empleadores.
Águila Lima insistió que el gobierno federal no debe seguir con las improvisaciones ni mostrar nuevamente espejitos a la población con la mentira de que, a través del IMSS Bienestar, “ahora sí los mexicanos tendremos servicios de salud de primer nivel como los de Dinamarca”.
Tan grave es la situación, dijo, que estudios recientes han demostrado que con todas estas improvisaciones, “y siniestros y perversos modos de manejar la salud mexicana”, se han dado pasos hacia atrás, lo que se traduce en un retroceso “de más o menos 30 años, y si sigue como va, la cosa va a estar peor”.
Como ejemplo, la diputada priista refirió que los esquemas de vacunación para las infancias, en muchos casos, es incompleto; porque la rabia regresó al país, cuando estaba erradicada, “y eso se debe a los pocos recursos, estrategias y al descuido del gobierno federal para no aplicar el dinero y comprar a tiempo las vacunas”.
Ante esa situación, hizo un llamado a quienes integran las dos cámaras del Congreso de la Unión para que revisen esta situación “y tengan un poco de conciencia” para cuidar la salud del pueblo de México.
