En un hecho por demás sorpresivo, este jueves una persona acudió al módulo de canje de armas instalado frente a la presidencia municipal de Tlaxcala y entregó una granada de
mortero calibre 81 mm.
Personal de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) recibió esa arma singular y de inmediato -con todas las precauciones del caso- fue trasladada a las instalaciones militares para su destrucción.
Las granadas de mortero, como la que fue entregada, se incluyen normalmente entre el armamento de unidades de infantería del Ejército.
Según información proporcionada por el ayuntamiento capitalino, la persona que entregó ese artefacto también entregó una escopeta “la cual se redujo a un puñado de metal y madera”.
Sin embargo, no se dio a conocer qué tipo de electrodoméstico se le entregó a la persona que canjeó esa granada de mortero.
Esta es la segunda ocasión que, a través de las campañas de armas de fuego en la entidad, se registra el canje de artefactos singulares.
En la campaña del año 2018, un hombre –sin desdoro alguno- se acercó a un módulo de la ciudad capital y entregó un fusil de asalto
AR-15 del que, obviamente, no tenía permiso para usarlo.
De acuerdo con las reglas de esas campañas, los datos personales de quienes canjean las armas se mantienen en reserva, además de que no existe ningún tipo de averiguación.